jueves, 3 de octubre de 2013

El toro I

Si no hay toro, no hay nada…
Es por eso que lo primero que debemos analizar es qué es un toro de lidia, un toro bravo…
Obviamente todo el mundo sabe lo que es un toro; todos sabemos que es un mamífero cuadrúpedo que presenta un par de astas como defensas…Hasta ahí todo está claro. Pero en el toro bravo encontramos muchas particularidades; y la primera de ellas es que ha sido “buscado” por el hombre desde hace siglos para que tenga unas características definidoras y diferenciadoras del resto de bovinos. Es decir, es producto de una selección de rasgos físicos y de comportamientos  para llegar a un fin determinado, que es la lidia de este animal.
Pero de esta selección y de las distintas castas tradicionales y actuales del toro ya nos ocuparemos más adelante. Lo primero de todo es saber distinguir, saber apreciar, saber cómo es la apariencia de este animal, y para ello hay que empezar por el principio.
El cuerpo del toro está dividido en tres tercios: anterior, medio y posterior. EN el primero de ellos adquiere capital importancia la cabeza, donde se encuentran las astas del toro, que les sirven de defensa. En medio de estas defensas se encuentra el testuz, y a todo este conjunto se le conoce con el nombre de “cuna”, de donde proviene además el término “encunado”; un torero resulta encunado cuando sufre una cogida y queda situado entre las astas y apoyado en el testuz.
Otra de las partes de la cabeza que tiene gran importancia son los ojos. El toro es un animal de miopía congénita, debido fundamentalmente a la distancia que separa sus ojos. Debido a este hecho, el toro tiene un ángulo muerto de visión que va aumentando a medida que el objeto observado se va alejando en línea a la dirección unilateral de la mirada…Dicho de otra manera: el toro es más peligroso si te ve de forma lateral a si lo hace de frente….Cuál es la manera de que el toro te vea de frente? Muy fácil, cruzándote con él…Entonces, el torero que se cruza lleva a cabo un toreo ventajista…? Por qué se le exige al torero que se cruce si aparentemente este hecho ofrece menos peligro…?En primer lugar porque el toreo actual exige el “cruzarse”; en segundo lugar, porque si bien es cierto que el toro tiene menos capacidad de visión, tiene más capacidad de reacción y más certeza en su derrote. Estando cruzado con el toro, y de frente a él, se está más cerca del animal, y cualquier estímulo puede hacer que el toro se defienda, y a esa distancia el peligro es más que evidente…Pero, consideraciones aparte, hay un hecho cierto: el toro tiene una visión binocular, que en horizontal, es solo de 20º grados.

El cuerpo del toro se compone de las siguientes partes, comenzando por su arranque en la cabeza: zodete o inserción, mazorca, pala y pitón. Cuando hablamos de los pitones del toro es fácil entrar en polémicas de afeitado,  fundas, toques…Pero eso es algo que ahora mismo no debería importarnos; lo que aquí nos ocupa es saber cómo denominamos a los toros en función del aspecto de los cuernos…Pues bien, la lista de términos es amplia, y no es intención de la que aquí escribe aburrir y cansar antes de tiempo. Véanlo ustedes mismos…


Estos son solo algunos de los términos que se emplean, encontrándose también en esta lista otros como engatillado, mogón o astillado…Para los más curiosos, una web bastante ilustrativa…http://www.galeon.com/contrabarrera/toro.htm#cuernos
Otro aspecto a tener en cuenta son las “hechuras” del toro, la apariencia que tiene su cuerpo...


Cuando leemos un crónica de un festejo o un programa de mano, podemos observar que “el color” de los toros está especificado. Los toros no son de colores…Tienen capas y pintas distintas, particularidades tanto en el pelaje de su cuerpo como en el de su cabeza.
Podemos encontrar por tanto capas simples (colorado, castaño, jijón, negro mulato…), capas compuestas por pintas en el tronco y en la cabeza (cárdeno, entrpelado, burraco, berrendo, listón, sardo, lucero, llorón, bocinegro…) Hay multitud de combinaciones posibles; y estas combinaciones so producto, y también objeto de la selección de la que hablábamos antes. Para muestra…


Si quisiéramos especificar cada una de los pelajes, capas y pintas que puede presentar los toros mucho me temo que no acabaríamos nunca…
Pues hasta aquí lo relativo a la forma y la apariencia del toro…
En breve hablaremos del toro en el campo, de las distintas castas y procedencia de los toros, es decir, por qué se parecen entre sí algunos toros de ganaderías distintas. Hablaremos de por qué embiste el toro y del comportamiento del toro, y de muchas más cosas…
Hasta entonces, y para saciar curiosidades…

De COSSIO, José María, Los Toros. Tratado técnico e histórico, tomo I.

FERNÁNDEZ ROMÁN, Fernando, Los toros contados con sencillez. Ed. Maeva, 2001








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